Esta es una de las consideraciones más importantes en la práctica. No se trata solo de la selección de materiales, sino también del posicionamiento del producto y la estructura de beneficios.
Diferencia de costo de material
Las normas del mercado muestran que los chorros de acero inoxidable 316 cuestan aproximadamente entre 1,4 y 1,6 veces más que los de acero inoxidable 304.
En el caso de los jacuzzis con 40-50 chorros, la diferencia de precio es significativa. Las decisiones deben alinearse con el posicionamiento del producto.
Lógica de selección de materiales
1. Productos de gama media
Generalmente se utiliza acero 304 como material principal. Es duradero y permite controlar el presupuesto.
2. Productos de gama alta o emblemáticos
Los chorros de masaje principales se actualizan a 316 para garantizar resistencia a la corrosión a largo plazo y compatibilidad con agua salada.
3. Resorts costeros o bañeras de alquiler
A menudo, entre el 50 y el 75 % de los chorros son 316 debido a la alta frecuencia de mantenimiento y la calidad variable del agua.
Lógica del mercado de repuestos
Los compradores suelen tener en stock dos tipos:
Estándar: 304
Actualizado: 316
La razón es sencilla:
Los usuarios de sistemas de sal tienen poca tolerancia a la decoloración y están dispuestos a pagar más por 316.
Los equipos de mantenimiento prefieren recomendar el 316 porque reduce el riesgo posventa.
Imagen y valor de marca
Los chorros de acero inoxidable tienen un atractivo visual. Su reflejo y textura metálica hacen que la bañera luzca más resistente, duradera y de primera calidad.
Esto es fundamental para el posicionamiento de la marca, por lo que, incluso con un costo más alto, muchos fabricantes priorizan los chorros de acero inoxidable para áreas visuales clave.